Por Francisco Blázquez
Es muy posible que las peores películas de la historia se encuentren dentro del género de ciencia ficción. Plan número 9 del espacio exterior (Ed Wood, 1956) es una muestra excelente de ello. Reconozco, sin embargo, una fascinación por este tipo de cine que inventa mundos alternativos y futuros inquietantes llenos de milagros tecnológicos y pesadillas científicas.
Pero no nos engañemos. Estas películas, aunque se desarrollen en el futuro siempre son una proyección de los miedos y esperanzas del presente. Hoy nos ocuparemos del subgénero que se ha dado en llamar cine distópico. Sigue leyendo